En estos días, en los que nos vemos obligados a permanecer en casa, reducir significativamente la actividad económica y maximizar al máximo las medidas de seguridad referentes a la posible contaminación por corona virus COVID-19, es cuando se hace fundamental contar con unas instalaciones adecuadas a la situación.
Y nos referimos, específicamente, a los sectores farmacéuticos, alimentarios y científicos. Entornos que necesitan de plenas garantías en áreas de trabajo controladas. Por ello, desde Isobox Systems, queremos hacer un repaso, sencillo, pero muy aclaratorio, de lo que supone una sala limpia en estos momentos, y de la importancia de contar con una para garantizar al máximo los procesos productivos en sectores claves.
Las salas limpias se centran en varios factores para crear un ambiente libre de contaminantes. Esto se logra mediante la supervisión y el mantenimiento:

  • El control de los contaminantes en el aire
  • Presurización
  • La temperatura y la humedad
  • Acceso restringido

¿Para qué se usan las salas limpias?

Las salas limpias se utilizan en los sectores científico, farmacéutico y, más recientemente, alimentario, entre otros, para garantizar los más altos niveles de higiene en la realización de trabajos esenciales. Cualquier industria en la que las pequeñas partículas puedan dañar los procesos de fabricación se beneficiará del uso de un entorno controlado, como una sala limpia.

¿Cómo funciona una sala limpia?

Las salas limpias están diseñadas para garantizar que se mantengan en todo momento niveles extremadamente bajos de partículas, incluyendo organismos en el aire, polvo y partículas vaporizadas.
Estas partículas se transportan de forma natural por el aire, pero pueden ser peligrosas para ciertos procesos. Por ejemplo, cuando se procesan productos cárnicos o lácteos, limitar la cantidad de bacterias en el área de preparación es vital para garantizar la seguridad de los consumidores.
Los filtros de aire de alta eficiencia para partículas (HEPA) y los filtros de aire de partículas ultrabajas (ULPA) garantizan que el aire dentro de una sala limpia o un espacio designado esté libre de partículas.

Clasificaciones de salas limpias

La ISO estableció clases específicas de salas limpias dependiendo de su función. La clase en la que se encuadra una función esbozará el cambio de aire requerido cada hora junto con los detalles relativos a la limpieza del aire por la concentración de partículas y los límites de contaminación de partículas en el aire.

¿Qué es la contaminación en una sala limpia?
La contaminación se refiere a cualquier cosa que pueda hacer que un producto o proceso sea impuro, ya sea por tocar o mezclar el producto o proceso. La contaminación dentro de una sala limpia puede tomar la forma de:

Personal
Los individuos son la principal fuente de contaminación, ya sea a través del desprendimiento de células de la piel, aceites o cabellos, a través de la saliva, la transpiración o los restos de su ropa. Por ello, todo el personal que deba trabajar en una sala limpia debe estar altamente capacitado y llevar equipo de protección, incluyendo máscaras y gafas, trajes, guantes y protectores de zapatos. La ropa requerida dependerá de la función del espacio. También es esencial que se limite el acceso a la zona para evitar una mayor contaminación.

Contaminación del aire
La contaminación del aire es un problema importante cuando se opera una sala limpia, ya que las partículas son lo suficientemente pequeñas como para flotar en el aire durante un tiempo considerable. La filtración continua de estas partículas es necesaria para que el espacio permanezca lo suficientemente seguro como para continuar con la producción o completar los procesos.

Contaminación química y gaseosa del proceso
En las salas blancas se utilizan grandes cantidades de productos químicos, dependiendo de la función del espacio. Para combatir el riesgo de contaminación de estos productos químicos, es necesaria la entrega en contenedores limpios y no corrosivos, junto con un transporte limpio.
Los gases utilizados sólo deben ser filtrados para reducir los niveles de partículas y ser de la mayor calidad posible. También es vital considerar los vapores o subproductos de los gases utilizados y cómo éstos pueden reaccionar con la zona para producir contaminantes no deseados.

Contaminación del agua
El agua se utiliza principalmente en el proceso de limpieza dentro de una sala limpia. Muchos fabricantes tratan el agua antes de usarla para eliminar los contaminantes que puedan estar presentes como:
• Sales y minerales disueltos
• Bacterias y orgánicos
• Partículas

Equipo y consumibles
Cualquier equipo que se traiga a la sala limpia podría contaminar el área. Por lo tanto, todo el equipo debe ser fabricado según estrictas directrices y todo dentro del espacio debe ser limpiado efectivamente con paños y desinfectantes especialmente hechos para salas limpias.

¿Cómo se mide la contaminación dentro de una sala limpia?

Midiendo el número de partículas en el aire presentes en un metro cúbico de aire, una sala limpia puede medir el nivel de contaminación presente. Las partículas en el aire se miden en micrones, siendo un solo micrón más delgado que un cabello. Además, resulta imprescindible el análisis microbiológico tanto de aire como de superficies con la asiduidad que esté establecida en los protocolos de seguridad de la empresa.

Esta es solo una aproximación, explicada de un modo muy sencillo, de la importancia que supone contar con una sala blanca en sectores determinantes, que requieren de entornos de trabajo muy limpios y libres de cualquier agente contaminante. Sobre todo en estos días.