Equipamiento para salas blancas: Cálculo de la huella de carbono

En la búsqueda de la sostenibilidad en la fabricación de medicamentos, ¿qué pueden hacer las compañías farmacéuticas y cómo pueden los proveedores de tecnología ayudarles a alcanzar sus ambiciosos objetivos? Un factor crucial radica en el cálculo de las emisiones de carbono de las máquinas, como lo muestran los análisis actuales.

La industria farmacéutica es un sector de extremos. Nuevos medicamentos están aumentando drásticamente la esperanza de vida de los pacientes, los precios de terapias innovadoras están en aumento, pero lamentablemente, el consumo de recursos aún supera considerablemente el de otras industrias.

Mucho antes del aumento actual en los precios de la energía, el uso sostenible de la energía y los recursos se convirtió en un desafío importante para los fabricantes de productos farmacéuticos. Con alrededor de 20,000 compañías en todo el mundo, la industria tiene un impacto significativo en las ventas de medicamentos y las emisiones de carbono. Según un estudio de la Universidad McMaster, la industria farmacéutica produjo alrededor de 50 toneladas métricas de dióxido de carbono equivalente (CO2e) por cada millón de dólares estadounidenses en ventas en 2015, superando incluso a la industria automotriz a nivel mundial.

A pesar de todas las críticas, la industria farmacéutica también enfrenta una gran presión: los medicamentos que salvan vidas deben llegar al mercado con alta calidad y dentro de plazos específicos. Al mismo tiempo, los fabricantes de medicamentos deben diseñar procesos que generen considerablemente menos emisiones.

Este equilibrio requiere tecnologías de menor emisión, desencadenando una carrera por estrategias innovadoras en la industria. El 80% de las compañías más grandes de la Federación Internacional de Fabricantes de Productos Farmacéuticos y Asociaciones (IFPMA) buscan reducir al máximo sus emisiones o incluso lograr neutralidad de CO2, mientras que algunos actores clave del mercado apuntan aún más alto.

Esto también afecta a los proveedores de tecnología: no solo deben cumplir con sus propios objetivos de emisión, sino que también son responsables indirectos de los de sus clientes.

El papel de los proveedores de tecnología

Mientras que las compañías farmacéuticas persiguen diferentes estrategias y se fijan metas con plazos variables, comparten una visión común y necesitan que sus socios las respalden en sus esfuerzos de sostenibilidad. El cálculo de la huella de carbono, los objetivos basados en la ciencia o los informes de sostenibilidad están en la agenda de productores farmacéuticos, fabricantes contratados y proveedores de tecnología por igual. Estos últimos desempeñan un papel clave en la estrategia de sostenibilidad de la industria farmacéutica, ya que las emisiones de equipos son una parte importante de la huella de carbono tanto de CDMOs como de fabricantes de medicamentos.

Debido a su larga vida útil, el equipo contribuye a las emisiones totales durante varias décadas. Uno de los mayores impulsores para la reducción de CO2 radica en los propios proveedores de tecnología: al optimizar continuamente sus máquinas y desarrollar soluciones más eficientes en energía, pueden contribuir significativamente a la reducción de emisiones y a una mayor sostenibilidad en toda la industria.

Los procesos posteriores también ofrecen potencial de ahorro, especialmente a través de materiales de embalaje innovadores y alternativos. Aunque los medicamentos líquidos requieren vidrio y plástico de un solo uso en el embalaje primario, hay espacio para cambios en las formas sólidas. Los envases blister hechos de papel o polipropileno reciclable, que buscan sustituir a las películas de termoformado estándar de cloruro de polivinilo (PVC), pueden utilizarse para el embalaje primario de tabletas y cápsulas. El embalaje secundario, a su vez, depende en gran medida de las cajas.

Divulgando la huella de carbono

Junto con la tecnología, su precio de mercado y el costo total de propiedad (TCO), las emisiones del equipo se han vuelto cruciales para las decisiones de compra. Al divulgar sus propias emisiones y huella de carbono en plataformas como CDP o la Iniciativa de Objetivos Basados en la Ciencia (SBTi), los fabricantes de equipos aumentan la transparencia y establecen objetivos claros y públicamente disponibles para la mejora.

Las evaluaciones de agencias como EcoVadis, que califican a las empresas en varios criterios de sostenibilidad, confirman que actúan de manera sostenible y de acuerdo con normas internacionales.

Otro campo de acción para los proveedores de tecnología incluye análisis de CO2 basados en software. Nuevos métodos están disponibles para analizar las emisiones de carbono a lo largo de todo el ciclo de vida del equipo con evaluaciones de ciclo de vida. Estas evaluaciones sirven para identificar posibles optimizaciones tecnológicas futuras.

Fundamentos para la sostenibilidad en la industria farmacéutica

Considerando los desarrollos y esfuerzos actuales, la industria farmacéutica podría alcanzar la neutralidad climática en las próximas dos décadas, al menos aquellas compañías que ya están persiguiendo una clara estrategia de sostenibilidad. A largo plazo, esta tendencia incluirá a otros actores además de las «grandes farmacéuticas«, como fabricantes contratados y organizaciones de fabricación más pequeñas. El consumo de medios y energía, así como la prevención de residuos en producción, transporte y embalaje, serán los principales impulsores.

Además, las actualizaciones de software para máquinas existentes y los análisis de CO2 pueden sentar las bases para operaciones más eficientes en energía.

Los proveedores de tecnología de salas blancas que han invertido en su propia estrategia de sostenibilidad en una etapa temprana ahora pueden posicionarse como socios valiosos con opciones adicionales de ahorro de energía y atractivas soluciones tecnológicas nuevas.